Lexmark es una de las marcas de printing que más ha hecho hincapié en hacer evolucionar su modelo de negocio. De venta de hardware pasó a servicios administrados de impresión, siendo uno de los líderes en eficientizar costos y procesos al respecto en clientes corporativos. Hoy va más allá: busca posicionarse como administrador de contenido no estructurado.
Señala José Gómez Ríos, director general Cono Sur, uno de los territorios avanzados de la marca en la tendencia: ‘Con boom digital de información, hay menos papel pero mucho más texto, planillas, imágenes, radiografías, etc., que se transmiten. Esto es información no estructurada, que constituye ya el 80% del total. En las empresas el manejo de información es 20% automático, y 80% manual. Nuestra propuesta de valor hoy es ayudar a las empresas a conectar su core business con la información estructurada y no estructurada por igual’.
Hoy el 60% de la facturación de Lexmark es servicios de impresión y ya el 40% es lo nuevo, en torno a la plataforma Perceptive Software, que reúne un buen surtido de empresas de software adquiridas bajo tres conceptos, Captura, Administración y Búsqueda. ‘Varias empresas de printing han avanzado hacia manejo de información, pero nosotros somos los únicos con plataforma 100% propia, es decir sin recurrir a soluciones de terceros. Y aparte tenemos gran expertise en el mercado corporativo, que es clave para ser eficaz en estos nuevos segmentos’.
Otro aspecto clave es un approach rápido y simple de soluciones. ‘En busca de atender el manejo de información, el mercado en un tiempo entró en proyectos faraónicos de gestores documentales. Lo nuestro apunta a proyectos cortos, de ROI muy medible, con baja inversión, mejorando costos, procesos (BPM) performance. Es lo que buscan los responsables IT hoy en día’.
‘Por ejemplo tenemos el caso de una empresa de manufactura, que tenía como clientes una gran cantidad de quioscos de Argentina. Consolidar su información de pedidos y stock les llevaba un ciclo de 4-5 días. Nosotros instalamos impresoras en sus móviles de distribución que al imprimir los remitos enviaba la información a la central y así se bajó el tiempo de consolidación a un ritmo diario. Es un buen ejemplo de a lo que apuntamos y podemos lograr’.
