Cloud computing, de la tendencia a la realidad
Desde hace unos años se habla de cloud computing como una de las tendencias del mercado de tecnología. La realidad muestra que esta es una tecnología consolidada en la planificación estratégica de los negocios y quienes no la adoptaron sienten que están un paso atrás. Asimismo, las empresas con presencia en la nube comienzan a discutir la manera en la que pueden maximizar sus resultados.
Analistas de la consultora Forrester calculan que para el año 2020 la nube tendrá aproximadamente el 15% del mercado mundial de TI. Argentina está a la vanguardia de la adopción de esta tecnología. Según el informe de BSA (Global Cloud Scorecard 2013) el país se encuentra en la posición 16, con una leve diferencia con México (15) y muy adelante de Brasil, en el puesto 22. Una investigación realizada por USUARIA Research, en el segmento de grandes y medianas empresas locales, revela que la tasa de utilización de cloud en 2013 se ubicó en el 28,8%. Para el 2016 esta cifra superaría el 40%.
Un análisis más profundo detalla que mensajería, colaboración, ofimática y almacenamiento son las aplicaciones más elegidas en la primera aproximación a una estrategia cloud. Los principales motivos por los que localmente se adoptan lentamente aplicaciones como ERP, BI, Payroll o CRM entre otras, son las dudas con relación a la privacidad, seguridad, conocimiento de sus expertos y la falta de estándares. Para enfrentar esta problemática existen varias iniciativas como Cloud Standards Customer Council (CSCC), Cloud Application Management Platforms (CAMP), Distributed Application Platforms and Services (DAPS), entre otras.
A medida que las inversiones en la nube siguen creciendo el número de consultores especializados en esta tecnología, que ayudan a las empresas a construir y utilizar la arquitectura de la nube, también se incrementa. Incluso, cada vez son más las especializaciones y certificaciones en Cloud Computing para que los departamentos de TI de las empresas se conviertan en especialistas internos y logren ayudar al negocio a obtener una mayor agilidad, flexibilidad y entendimiento de las capacidades de la nube.
Si bien los incidentes de seguridad que involucran a esta tecnología son una realidad –el caso CodeSpace, ocurrido durante este año es un ejemplo–, esta problemática no es diferente a las que se enfrentan las organizaciones fuera de este entorno. Aún cuando la industria contempla la seguridad como un factor importante a la hora de garantizar la robustez de sus ofertas y se alió a los profesionales de seguridad a la hora de evaluar y registrar su cumplimiento con estándares a seguir, el eslabón más débil es la implementación y, principalmente, el usuario. Entonces, la pregunta es: ¿está su gente preparada para hacer el salto a la nube?
