Según el área de Tax & Accounting de Thomson Reuters en Argentina, la resolución general 3749 de AFIP genera que cerca de 400 mil empresas deberán actualizar su proceso de gestión y el esquema actual de software en un periodo no mayor a 3 meses. El objetivo es que puedan empezar a generar Factura Electrónica, obligatoria a varios segmentos a partir de julio de este año.
Daniel Skiarski, director de negocios de Tax & Accounting Software, explica: ‘La implementación de Factura Electrónica en una empresa no se reduce a un tema informático o tributario. Revisar los procesos internos de facturación, cobranzas y pagos, establecer un nuevo vínculo con clientes y proveedores y actualizar las actividades de cumplimiento tributario es indispensable para que se pueda adoptar el proceso más efectivo de gestión e implementación del nuevo modelo’.
El cumplimiento del régimen afecta a la actividad económica en sus aspectos centrales: cadena de valor, finanzas e impuestos. Por ello, las empresas deben llevar a cabo con urgencia el proceso de adecuación a las nuevas exigencias Debido a que el proceso la emisión y el cumplimento del régimen sólo se pueden hacer a través de medios informáticos, la elección del software es una decisión estratégica, de gran importancia. Hacer uso de soluciones flexibles, que se adapten a las necesidades de la empresa, de proveedores reconocidos y conectadas con los sitios electrónicos de la AFIP permitirá una gestión más rápida’.
‘La forma en la que decida adaptarse a las nuevas exigencias puede afectar positiva o negativamente a todo el funcionamiento de la compañía. Para los profesionales contables, el corto plazo de adecuación debe convertir esta nueva obligación en una oportunidad para revisar el funcionamiento de las actividades claves de las compañías y reformularlas con el objetivo de ganar eficiencia, cercanía con el mercado y productividad’, concluye el ejecutivo.
