Las fluctuaciones en el precio del barril de petróleo crudo obligan a las empresas del sector a tomar decisiones para reducir los costos operativos. Normalmente, ajustes suele ser sinónimo de desinversión en áreas críticas y adyacentes al negocio. Sin embargo, la inversión en tecnología ayuda a mejorar la operatoria en un mercado tan competitivo y a reducir costos con pequeñas innovaciones que dan inteligencia a una infraestructura que puede parecer obsoleta.
La gran dispersión geográfica entre los pozos obliga a que la medición de la producción se haga tradicionalmente de forma reactiva en base a la producción propiamente dicha. Esto implica tener en cuenta varios temas, entre ellos, la prospección de la producción. Por la cantidad de pozos y la dispersión geográfica en las distintas cuencas de la Argentina, tener información del estado de cada pozo en tiempo real se convierte en algo crítico desde el punto de vista del control de la producción, la exploración y mantenimiento. A través de distintas tecnologías inalámbricas (WiFi) es posible brindar distintos tipos de conectividad, por ejemplo, iluminando las distintas zonas de los yacimientos para entender, de forma remota y en tiempo real, el estado, y poder tomar acciones preventivas y correctivas no solo desde el punto de vista de la producción sino también desde el control de stock de componentes.
Una vez conectados los pozos a la red es posible usar distintas soluciones tecnológicas para optimizar el manejo de la fuerza de trabajo en campo, y mejorar las tareas preventivas y correctivas del personal propio y contratado. También es posible asignar los recursos más idóneos en base al contexto, asegurando que la persona en campo contará con las habilidades, capacitaciones y certificaciones requeridas para el tipo de tarea.
El abastecimiento en los distintos componentes del negocio es crítico, por lo que requiere un análisis exhaustivo. La falta de control, en tiempo real, del estado de los tanques de combustible de las estaciones de servicio (la medición de los mismos en muchos casos es realizada de forma manual por personal de la estación cada un determinado tiempo), tiene grandes consecuencias en la operatoria del negocio. La tecnología puede prevenir el quiebre del stock, evitando el desabastecimiento, que a su vez genera una mala experiencia para el cliente.
Nos encontramos en un momento tecnológicamente muy interesante para brindar soluciones al negocio que permiten la optimización de sus recursos, ahorrar costos, incrementar la productividad y, sobre todo, mejorar la experiencia de sus clientes finales.