En el marco de la creciente interconexión de dispositivos y objetos en Salud, Liveware señala desarrollos de nuevas opciones para potenciar el área así como la nanotecnología como tecnología disruptiva junto a Internet Industrial.
Alejandro Bianchi, presidente, afirma: ‘Creo que aún no estamos conscientes del verdadero alcance que esta tecnología puede ofrecer. Con la implementación de la tecnología en el área de salud, se podrán resolver trámites y hacer la vida más fácil cuando tengamos que interactuar con el sistema de Salud. Esto no apunta a eliminar la relación médico-paciente, sino a hacer las cosas más simples. Por ejemplo, la historia clínica personal accesible de cualquier dispositivo, obtener informes de laboratorio desde el smartphone y poder hacer consultas a través de videoconferencia con mi médico de cabecera en cualquier lugar son algunas de las facilidades que cuando estén disponibles se adoptarían de inmediato’.
En este sentido, la información es crítica y Big Data puede ayudar a explorarla y ofrecer modelos predictivos y prescriptivos que permitan proyectar en consecuencia. Asimismo, la empresa indica que es necesario políticas de estado que incluyan el ámbito privado para que se den las condiciones para que esta tecnología sea útil en todos los estratos de la sociedad.
Además, señala quie los beneficios se observarán en una mejor calidad de atención, mayor dedicación al paciente, menor burocracia del papeleo, mejoramiento de la gestión del gasto médico y mayor integración para compartir información que redunde en mejores tratamientos. Desde el punto de vista del paciente habrá una mejora en la calidad de atención, menos stress ya que dispondrá de diferentes maneras de interactuar con el sistema y con su médico.
Por su parte, el médico dispondrá de variadas maneras de interactuar con sus pacientes, recibiendo información casi al instante de diferentes fuentes y a nivel Cloud. Así, podrá definir si es necesaria una consulta personal o hacer una revisión a través de una videoconferencia. Las posibilidades de interconsulta virtuales acelerarán los diagnósticos complejos, siempre manteniendo la relación de confianza entre el profesional y su paciente.
Actualmente, existen diversos sensores para, por ejemplo, poder hacer algunos análisis de variables clínicas como hepatograma, glucemia y otras. Estos sensores están embebidos en dispositivos móviles. Los avances son constantes a nivel global, y en pocos años se podría monitorear en forma remota a un paciente mientras un conjunto de sensores emiten información hacia un centro de salud que esté listo ante cualquier alteración que necesite atención urgente.
En este marco, el proceso de transformación digital requerirá un trabajo multidisciplinario (primero y principal con el profesional médico) y un cambio cultural. También hay que considerar los aspectos legales y normativos que, junto con la seguridad de la información, deberán ser revisados para lograr esta transformación.
‘La tecnología debe ayudar a que la vida de un enfermo sea cada vez más sencilla con foco fuerte en la persona y comprensión de su situación. Si la tecnología no ayuda a lograr esto último, habrá fracasado en su objetivo primario. IoT, la Internet Industrial, Real Time Analytics y la computación cognitiva serán una ayuda imprescindible del profesional médico y cambiarán de manera radical lo que hoy entendemos por un sistema de salud’, concluye Bianchi.
