El bitcoin puso el tema en las tapas de los medios de comunicación y en la discusión en las redes sociales. Sin embargo, más allá de la más renombrada de las monedas virtuales, en los últimos tiempos se incrementaron de manera exponencial las ofertas iniciales de monedas (ICO, por sus siglas en inglés), es decir, del modelo de recaudación de fondos de inversores, basado en blockchain, a través de la oferta de estas criptomonedas.
Según un informe global, el monto recaudado el último año en proyectos ICO trepó hasta casi los US$4.000 millones, el doble de lo acumulado en el mismo período por capitales de riesgo en iniciativas sobre blockchain, la tecnología que aporta máxima transparencia ya que permite construir registros digitales inviolables para transacciones de las que intervienen múltiples partes.
El mencionado estudio coloca a la Argentina en el puesto número doce entre los países más originantes de proyectos ICO en términos de volumen: el país alcanzó los US$62 millones en iniciativas relacionadas. El ranking está encabezado por Estados Unidos (US$1.031 millones), Rusia (US$310 millones), Singapur (US$260 millones) y China (US$256 millones).
Ricardo Scattini, arquitecto de Soluciones Digitales de Practia, señala: ‘Más allá de la popularidad explosiva de estas propuestas y del creciente nivel de madurez que exhiben las monedas virtuales, no se trata de invertir a ciegas. Sin ir más lejos, la Comisión Nacional de Valores advirtió en un comunicado de diciembre de 2017 que se trata de una inversión especulativa de alto riesgo, con operaciones que sufren de ausencia de regulación específica, volatilidad de precios y falta de liquidez, potencial de fraude, entre otras falencias. Otro riesgo lo constituyen las amenazas informáticas: las ICOs parecen ser un imán para los hackers’.
En términos regulatorios, los escenarios van desde ignorar totalmente la existencia de las ICOs hasta tratar de ajustarlas a las leyes existentes. En el medio, los mismos jugadores del mercado están trazando algunos esquemas autorregulatorios, como ocurre con la iniciativa Simple Agreement for Future Tokens (SAFT).
Atlas, un club pionero en utilizar blockchain y criptomonedas
Blockchain y las monedas virtuales como los bitcoins ya son una realidad en el país. Sus aplicaciones son muy diversas, sea en industria financiera o tecnológica, e incluso el mundo de los deportes, como es el caso de Atlas, el primer club de fútbol argentino en utilizar blockchain para su negocio.
Este club de la Primera D lanzó este año una innovadora iniciativa de marketing apalancada en estas nuevas tecnologías: se trata del patrocinio y padrinazgo de jugadoras del equipo femenino y sus camisetas, que serán únicas, ya que contarán con un solo sponsor en el frente y un nombre de padrino o madrina en sus mangas.
Blockchain permite registrar transacciones, datos y objetos únicos -como estas camisetas- de manera inalterable, garantizando seguridad, procedencia y trazabilidad. Mediante esta innovadora iniciativa, Atlas brindará la posibilidad de que sponsors y padrinos apoyen a jugadoras mediante ICOs registradas en blockchain, dándoles la posibilidad de ser parte de su éxito y sus futuras transferencias a otros clubes.
