Gracias a los dispositivos de protección de energía así como la mejora en el uso y manejo de la electricidad, el número de cortos circuitos durante la temporada navideña disminuyó en los últimos años. Sin embargo estas estadísticas siguen siendo muy altas e implican un peligro latente no solo para los equipos electrónicos de las casas y oficinas, también para la misma vida porque los cortos circuitos pueden desencadenar incendios.
De acuerdo a datos del Cuerpo de Bomberos de la CDMX en diciembre del año pasado ocurrieron 71 corto circuitos, mientras que hace 10 años sucedieron 85 en este mismo periodo.
Miguel Monterrosas, director de Soporte Técnico de Tripp Lite, señala: ‘Los corto circuitos ocurren principalmente por el uso de aparatos eléctricos en mal estado, el manejo inadecuado del suministro eléctrico al conectar, por ejemplo, demasiados enchufes o adornos navideños en una sola barra de contactos sin tomar en cuenta la carga de voltaje, así como por factores climáticos como tormentas e inundaciones en los pozos subterráneos de distribución’.
Por ello es fundamental utilizar sistemas UPS/No Break’s, barras multicontactos con supresor de sobretensiones o acondicionadores de línea, que además de proteger los dispositivos tecnológicos contra las fallas de la energía, incorporan en su chasis materiales no inflamables construidos con policarbonato o PVC, que evitan que la flama que se genera por el corto circuito se propague.
Además de proporcionar la información referente al voltaje que tienen conectados, los dispositivos de protección de energía de Tripp Lite integran supresores de calor que soportan grandes cantidades de energía, así como disyuntores térmicos que absorben el impacto del corto circuito e impiden que se dispersen los flujos de corriente elevados que pueden causar flamas o incendios.
Si bien, hace unos años los cortos circuitos se incrementaban de manera significativa en diciembre, estas fallas ocurrieron de manera más frecuente entre los meses de mayo y septiembre del 2017 en que se reportaron poco más de 100 cortos circuitos mensuales, en promedio.
Así mismo, es común que los mercados de temporada navideña se conecten a la red de distribución de energía eléctrica de manera ilícita a través de los llamados ‘diablitos’.
De acuerdo a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en promedio detectan y eliminan 112 mil conexiones directas (diablitos) cada año, con un promedio de 7,200 en los meses de diciembre.
Según Monterrosas, estas conexiones que comúnmente provocan bajo voltaje en el suministro eléctrico, ocasionan aumentos muy drásticos de voltaje cuando se dejan de utilizar, por ejemplo durante la tarde/noche, que pueden quemar o descomponer los dispositivos electrónicos del hogar, los centros de datos de las empresas, sus sistemas empresariales, equipos de vigilancia y controles de acceso, afectando la continuidad de sus operaciones.
‘Actualmente es imprescindible utilizar equipos de protección de energía que dependiendo del modelo, pueden corregir automáticamente caídas y aumentos de voltaje, brindar protección de precisión, tiempo de respaldo de energía eléctrica a través de sus baterías e incluso pueden enviar notificaciones referentes a las condiciones de operación del equipo ya sea detección de sobrevoltaje o sobrecarga, entre otros’.