Cuando el físico alemán Rudolf Hertz logró la primera transmisión con ondas electromagnéticas en lugar de cables, usando un oscilador como emisor y un resonador como receptor, hace 131 años, seguramente no imaginó que había dado el primer paso de lo que hoy es Wi-Fi, esa tecnología de comunicación inalámbrica que emplea radiofrecuencias para transmitir datos conectando todo tipo de aparatos (desde laptops, tablets y smartphones, hasta electrodomésticos, sensores, autos y mucho más) a internet.
Si bien hubo una época en la que tener Wi-Fi era un lujo alcanzable para pocos, hoy sería impensable que fuera así. Actualmente, a él le debemos mucho de lo que hacemos todos los días, comenzando por cómo interactuamos, nos entretenemos y nos cuidamos, y continuando con muchas de las decisiones que tomamos en nuestro día a día.
En Aruba, una empresa de Hewlett Packard Enterprise (HPE), queremos compartir 5 ejemplos que destacan por la forma en que Wi-Fi ha transformado nuestras experiencias:
1. Apps que complacen deseos: Estamos en la era en la que nosotros los consumidores somos los reyes, y todo está dispuesto para complacernos, al menos en el ámbito comercial. Hoy, gracias a opciones de comida a domicilio a través de una aplicación, nuestros antojos están en la puerta de la casa en cuestión de minutos.
Lo mismo ocurre cuando necesitamos ir de la casa o el trabajo (donde normalmente tenemos WiFi) hacia otro lado: basta con solicitar un taxi a través de las conocidas aplicaciones que hay hoy en día y, en unos 5 minutos, o menos, estará esperándonos frente a la puerta. Y para todo aquello que no es comida, pequeños mandados o servicio de taxi, están las aplicaciones de compraventa de artículos nuevos o usados, donde conseguimos desde ganchos de ropa hasta autos, y todo en la comodidad de nuestro sillón, a través del smartphone y a unos clics de distancia.
2. Casas inteligentes: Gracias a Wi-Fi, convertir nuestro hogar común en uno inteligente no sólo es actual, sino que además es bastante fácil. Al estilo de los edificios inteligentes, pero con la funcionalidad que requerimos en casa, hoy es posible “hablar” con nuestros sistemas de iluminación y riego, y los electrodomésticos, la televisión, el refrigerador y hasta los colchones, entre otros elementos, ahora pueden ser inteligentes.
Hoy es fácil encontrar cámaras de seguridad que se conectan de forma sencilla, e incluso se han desarrollado cámaras de seguridad con el diseño de una lámpara, para monitorear lo que ocurre en nuestro hogar cuando estamos ausentes, en tiempo real y de manera discreta. En remoto también podemos programar que las luces del patio o los aspersores del jardín se enciendan a determinada hora, y mientras estamos en el trabajo podríamos poner a funcionar la lavadora o el horno, a través del móvil. Incluso el refrigerador nos puede apoyar hoy día con la lista del súper.
Y al llegar a casa, Wi-Fi nos ha regalado nuevos aliados: son los asistentes digitales personales, que nos alegran el momento con algún chiste, poniendo nuestra música preferida, leyéndonos algún libro o resolviendo nuestras dudas.
3. Entretenimiento y bienestar doquiera que vamos: El aburrimiento es cosa del pasado. El streaming lo ha apartado de nosotros, porque sin importar dónde estemos, con sólo tener nuestro smartphone y Wi-Fi tenemos a la mano cientos de miles de películas, series y cualquier contenido multimedia sin necesidad de descargarlo en nuestros dispositivos, disponible on-demand vía Internet.
Asimismo, la invención de los wearables, tecnología que se viste o se lleva como un accesorio, nos permite continuar conectados con el mundo dondequiera que vamos. Sean smartwatches, smartglasses o smartclothes, nos mantienen conectados como lo haría un smartphone y, en algunos casos, son capaces de monitorear nuestro pulso, temperatura, presión arterial, etcétera.
4. Aplicaciones para colaborar e interactuar: Las plataformas de mensajería instantánea y las redes sociales hoy en día son vitales, lo mismo para algo tan trivial como conocer gente, saludar a nuestros allegados, informarles dónde y cómo estamos, lo que estamos haciendo y enterarnos de las noticias del día, como para conseguir trabajo, ampliar nuestras conexiones, colaborar con iguales en otros países (incluso en video), tener todo tipo de interacciones profesionales y hasta cerrar grandes negocios.
5. Vacaciones conectadas: Wi-Fi nos permite mantenernos siempre conectados al estar de crucero, en vuelos y en viajes largos en tren, al igual que en hoteles, restaurantes, museos, plazas y prácticamente en cualquier lugar en que estemos al estar de vacaciones o en cualquier tipo de viaje.
De manera que todo plan se mejora, pues tenemos acceso a todo lo que se nos ocurra gracias a nuestros dispositivos y a esta maravillosa tecnología. Por ejemplo, podemos saber qué atractivos turísticos están a corta distancia de donde estamos y tener llamadas de voz o video con los familiares y amigos que no han viajado con nosotros sin pensar en los altos costos de la larga distancia internacional, entre muchas otras posibilidades.
Los casos en los que Wi-Fi ha venido a cambiar la forma en que hacemos todo son incontables, sea en los estudios, el trabajo, la investigación, la música y, en fin, en cada área de nuestra vida. En conclusión, hoy no podríamos entender nuestra vida sin esta tecnología.