En Colombia, alrededor del 53% de las organizaciones más grandes han definido una reducción en el tamaño de sus oficinas, y más de tres cuartas partes aumentarán la flexibilidad laboral, según una encuesta de Cisco Systems.
Esta tendencia de trabajo desde casa, remoto o home office, significa para los trabajadores una reducción de tiempo de transporte y la gestión del tiempo para buscar una mejor calidad de vida. Estas modalidades de trabajo permiten mantener el distanciamiento social y se han convertido en parte de la nueva normalidad.
De acuerdo con los hallazgos del estudio citado previamente, más del 90% de las personas encuestadas manifestaron que no regresarán a la oficina a trabajar tiempo completo. Eso significa que la infraestructura para poder darle continuidad a los negocios a través del trabajo remoto requerirá de varios cambios.
Para poder realizar los trabajos remotamente se necesitan soluciones del Internet de las Cosas (IoT) que funcionen en conjunto y den continuidad a los negocios. Esto quiere decir que se requieren de varias cosas como la nube para almacenar datos, un computador, acceso a internet, aplicaciones que unifiquen escritorios, entre otros.
Todo esto requiere de un funcionamiento correcto de la energía y de la menor cantidad de fallas posibles en este aspecto ya que el suministro de energía errático puede ser un gran inconveniente en el hogar y en la oficina. Las fluctuaciones de energía pueden hacer que las luces parpadeen y que los equipos electrónicos del hogar se apaguen inesperadamente ose malogren.
Roberto Chávez, gerente de Desarrollo de Negocios Transaccionales SAM para Schneider Electric explica: ‘Al tener un mayor número de dispositivos conectados en casa es necesario contar con productos que eviten las altas tensiones o sobrecargas de energía que pueden llevar a que ocurran daños irreparables en los equipos’.
Por eso es necesario utilizar productos como los reguladores de voltaje (AVR, por sus siglas en inglés), que se encargan de regular el voltaje a la para tener una tensión estabilizada a la salida, hacia las cargas que van a alimentar.
‘Por ejemplo, a la entrada podemos tener una fluctuación de voltaje de alimentación entre 95 y 145 voltios y, si la tensión fluctúa entre esos niveles de voltaje, a la salida se tendrá un nivel de tensión adecuado para alimentar a las cargas; pero si se exceden estos niveles llegan los problemas. Aquí, se activa la función de regulación para atenuar la tensión alta y amplificar la tensión baja de modo que haya un voltaje adecuado a la salida para los equipos’, agrega el experto.
En el hogar se pueden conectar una impresora, una lámpara, una tostadora, una cafetera, un ventilador, una aspiradora, un pequeño refrigerador, entre otros equipos que no necesariamente requieren autonomía en caso de un apagón o falla eléctrica. Es por eso que Schneider Electric desarrolló los AVR LS600-LM y LS1200-LM diseñados para estabilizar el voltaje a niveles adecuados para sus dispositivos, y para brindar protección contra sobretensiones o picos dañinos, siendo ideales para soportar sistemas de entretenimiento, PCs y dispositivos domésticos.
El regulador abarca un mayor abanico de opciones de alimentación porque no solamente pueden conectarse cargas críticas a un regulador, sino también cargas propias del entorno del hogar, para lo que es recomendable utilizar un AVR que tiene un tiempo de respuesta rápido ante desviaciones de voltaje que exceden los umbrales mínimos y máximos descritos. ‘Esta es una solución robusta y orientada a las cargas electrónicas en casa o a aquellos equipos anexos a los sistemas críticos’, concluye Chávez.