El diferimiento de plazos, la cobranza ficticia y los tiempos en los créditos han crecido geométricamente, notándose la existencia de incobrables excesivamente altos, por lo que se hace imprescindible para las organizaciones la utilización del denominado “ejército invisible” que son las herramientas y soluciones tecnológicas: IA, Big Data, Analytics, APIs, etc.
En ese sentido, en la presente edición del Business Revolution Week Perú 2021, quedó confirmado que la transformación digital es una necesidad para todas las organizaciones y aquellas que no se adapten a la nueva ‘normalidad’ no tendrán opción y, en una gran mayoría, desaparecerán del mercado. Los expositores coincidieron en afirmar que la crisis ocasionada por el Covid-19 ha generado recesión económica, pérdida significativa de niveles de empleo, caída estrepitosa de los ingresos de las personas, y, por ende, deterioro de las carteras crediticias, las que tendrán que recuperarse con nuevas herramientas y estrategias de innovación.
Entre estas soluciones se encuentra el Open Banking, definido por Santiago Sinelnicof, arquitecto Principal de Soluciones en Red Hat Sudamérica y Caribe como la apertura de la información de los usuarios a terceros que puedan ofrecer a los clientes servicios adicionales útiles como nuevas aplicaciones, agilizar los procesos de préstamos y financiación, u otras herramientas.
Señaló: “Para desarrollar un exitoso Open Banking, las personas que gestionan las operaciones en los bancos tienen que cambiar su mentalidad acerca del manejo del negocio, poniendo en el centro al cliente quien, definitivamente, en esta nueva época ha elegido ser digital. Por ello, se deben manejar tres ejes fundamentales: tener altísima capacidad de cambio digital y agilidad; operación continua sin pérdida ni caídas de servicio 24/7; y mantener un modelo tecnológico de seguridad en la nube’.
Precisó que la banca, las fintech, junto a las compañías retail, así como las aseguradoras están revolucionando la forma de crear, distribuir y prestar servicios. Las interfaces de programación de aplicaciones (API) diseñadas sobre plataformas digitales abiertas constituyen elementos fundamentales de este nuevo modelo de distribución.
‘La digitalización, la inteligencia y los sistemas de conectividad son el futuro de las entidades del sistema financiero. Red Hat permite optimizar las operaciones para crear servicios innovadores con una plataforma de nube híbrida moderna, con sistemas de automatización, que mejoran la estabilidad, la seguridad y la resistencia’, aseveró.
Para Ignacio Capelo, responsable de Digital Consumer Finance del Banco Sabadell de México, el potencial de éxito del Open Banking tiene mucho que ver con la implementación de adecuadas normas regulatorias que permitan y hagan viables el desarrollo de nuevas estrategias operativas y canales. En los nuevos modelos de sistemas de tecnología abierta, los bancos tienen que acostumbrarse a competir a partir de lo digital.
Por su parte, Alfonso Maira, Co-founder and CEO en Floid: ‘En base a la experiencia de Chile, se ha apreciado que las entidades deben proponerse a ser colaborativas, e implementar plataformas de alto impacto que permitan sinergias y uniformidad de información entre los bancos, las fintech y los clientes’.
Agrega Alfonso: ‘En algunos casos, una de las trabas es precisamente la asimetría de la información, por ejemplo, en el Perú los bancos solo muestran los 20 últimos movimientos de sus clientes, mientras que en otros países ya es regular que se ofrezca la información de las transacciones realizadas en el último año’.
En cuanto al impacto de la crisis sanitaria en el sector y las soluciones planteadas, Enrique Vitar Farje, gerente de Normalización y Cobranza en Corona, sostuvo que la pandemia cambió todo el esquema de desarrollo empresarial, limitando el crecimiento económico por muchos años, quizás hasta el 2030.
Asegura Vitar Farje: ‘En el primer año de la crisis sanitaria la morosidad empresarial de los papeles a 30 días creció hasta el 40%, aunque a la fecha ya se encuentra normalizado’.
Cierra su presentación: ‘Esta experiencia ha enseñado a las organizaciones la obligatoriedad de conocer al cliente y sus necesidades, en todos los ámbitos de administración y gestión, disminuyendo los gastos y aumentando la productividad, generando cadenas de valor optimizadas con la incorporación de tecnología avanzada’.
Jazmín Roxana Cuch, gerente de Recupero de Créditos en Banco Comafi señaló: ‘El diferimiento de plazos, la cobranza ficticia y los plazos en los créditos han crecido geométricamente, notándose la existencia de incobrables excesivamente altos. Ante esta situación, se hace imprescindible para las organizaciones la utilización del denominado “ejército invisible” que son, ni más ni menos, que los recursos tecnológicos’.
Luego explicó: ‘La Inteligencia Artificial hace tiempo que ha dejado de ser ciencia ficción. El Big Data y Analytic ahora son fundamentales para establecer adecuados procesos de cobranza y modelos de propensión y proyección de recuperaciones, ya que esto requiere el manejo y cálculo de grandes volúmenes de datos. Más aún, la medición de la satisfacción de los deudores ha empezado a ser valorado’.
Jaime Córdova, gerente de Riesgo y Cobranza Tarjeta Cruz Verde en Solventa: ‘En Chile, uno de los pilares del cambio de actitud en la gestión del crédito retail ha sido el área de riesgos. La tecnología ha servido para implementar modelos estadísticos empleando sistemas híbridos de proyecciones de datos y analítica’.
Sigue: ‘En los últimos tiempos han salido a la luz nuevas empresas disruptivas que han revolucionado el sistema de crédito, esto es, las fintech, startups y unicornios’.
Finalmente, Martín Zegarra-Ballón, director de Riesgos, Cobranzas y BI en Banco Azteca: ‘Los bancos deben enfocarse en desarrollar negocios colaterales vinculados a la satisfacción de necesidades básicas, para estar siempre al lado del cliente, tal como ya lo están haciendo algunas entidades incursionando en negocios tales como educación, colegios, universidades, establecimientos de comercio menor y farmacias, entre otros’.
Cierra el evento afirmando: ‘La innovación y el uso intensivo de la tecnología son esenciales, ya que se debe tener en cuenta que lo más importante es el acceso a la información, más aún que controlar los riesgos’.