Cómo evaluar candidatos a testers a través de juegos

 Detectar y formar nuevos talentos en el ámbito de la tecnología es un trabajo que requiere mucha dedicación. En el caso particular de los candidatos a ocupar posiciones de testers, hay que tener en cuenta algunas competencias, ya que este tipo de trabajo requiere cierta agudeza de la atención, percepción, memoria y creatividad. Según proponen Spencer & Spencer en el libro “Competence at work, models for superior performance” una competencia “es una característica subyacente de un individuo que está causalmente relacionada a un estándar de efectividad y/o con un desempeño superior en un trabajo o situación”. Existen distintos tipos: las motivaciones, los rasgos, el concepto de sí mismo, los conocimientos y las destrezas.

 
Para evaluar las destrezas que se buscan en los candidatos a testers, los juegos pueden resultar una herramienta muy útil. Sin embargo, es clave seleccionar los que sean pertinentes para este fin. Uno de los que se pueden utilizar es el de encontrar las siete diferencias entre dos imágenes dadas. Esto permite determinar qué tan agudizada está la percepción de los participantes para detectar diferencias, su nivel de atención, concentración y predecir cómo se desempeñarían al tener que comparar los resultados esperados con los obtenidos al momento de ejecutar los casos de prueba.
 
La comparación de imágenes tiene la particularidad de que la visualización se realiza de manera simultánea. Para llevar el ejercicio a un grado superior de complejidad, también se puede implementar una dinámica similar con videos. Primero se visualiza una escena y en la siguiente proyección, se repite la misma pero con algunos cambios. Aquí, además de la percepción, atención y concentración, se requiere una mayor participación de la memoria. Esto apunta a que, durante las pruebas, muchas veces, ocurre que entre dos versiones de una misma aplicación, se introducen bugs o se incorporan cambios que no fueron pedidos y es necesario estar atentos para poder reportarlos.
 
La creatividad es muy valorada en este tipo de candidatos ya que permite pensar caminos alternativos, potenciales problemas y situaciones que no fueron contempladas durante las etapas de análisis, diseño o desarrollo. Aquí, es importante tener presente el concepto de “Pensamiento lateral” desarrollado por Edward De Bono. Proponer problemas cuyas soluciones requieran de esta línea de pensamiento, es una herramienta más que ayuda a la evaluación.
 
Por supuesto, también hay que tener en cuenta el pensamiento lógico. Para evaluarlo se pueden utilizar ejercicios como buscar el elemento perdido en una serie dada. Esto permite analizar la habilidad de la persona para encontrar patrones, que es lo que hacen los testers al momento de detectar y reportar un bug. Es decir, deben encontrar el patrón de ocurrencia para poder comunicarlo.
 
Finalmente, es importante tener en cuenta el tiempo que les lleva realizar cada actividad. Éste puede ser un factor predictor del tiempo que les llevarán luego las tareas de diseño y ejecución de las pruebas de software.
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