El cumplimiento de compromisos como los 17ODS de las Naciones Unidas y la descarbonización de la economía para 2030 han sido algunos de los muchos factores que han impulsado a los países a adelantar estrategias en pro de la transición hacia energías renovables. En ese sentido, el 2020 se convirtió en un año atípico no solo por la pandemia, sino también por haber marcado un hito histórico para la industria energética: de acuerdo con un reporte de la BP Statistical Review of World Energy, a nivel mundial, la energía renovable, liderada por la energía eólica, fue testigo de un aumento de 238 GW, lo que supone la demanda más alta comparada con cualquier momento de la historia.
En esa línea, el desarrollo de herramientas que permitan el máximo aprovechamiento de los recursos renovables ha sido una de las prioridades para las empresas del sector energético y relacionados. De acuerdo con Claudia Espitia, jefe del Área Técnica en Nexans Colombia: ‘Dispositivos como los paneles solares ya son muy conocidos por su portabilidad, duración y eficiencia’, lo que permite contar en el mercado con soluciones factibles para lograr aprovechar esta fuente de energía.
Sin embargo, la innovación en torno al empleo de las fuentes energéticas alternativas ha trascendido a otros sectores como el del transporte. De acuerdo con un estudio realizado por el Programa para el Medio Ambiente de la ONU, si continúan las tendencias actuales, a partir de 2025 se estarán desplegando anualmente más de 5.000 autobuses eléctricos en las ciudades latinoamericanas.
Igualmente, el informe afirma que la necesidad de aumentar los puntos de recarga ha generado nuevos servicios. Este es el caso de los ‘electrocorredores’ que ya pueden encontrarse en Brasil, Chile, México y Uruguay y permiten a los usuarios acceder a puntos de recarga rápida.
¿Qué pasa en Colombia y cómo actúa Nexans en este escenario?
El Plan del Gobierno Nacional sobre la transición energética estipula que en el país se busca llegar a generar 1.500 megavatios de energía a partir de fuentes renovables en 2021, acercándose a la meta de 2.400 megavatios para 2022.
De acuerdo con este programa, estos objetivos son alcanzables partiendo del hecho de que Colombia goza de un nivel de radiación solar que es actualmente 60% más alto y una velocidad del viento que es dos veces más rápida, que el promedio internacional.
En ese sentido, la voluntad por migrar hacia energías verdes y la inversión activa en proyectos de este tipo, han permitido consolidar en el país 15 granjas solares generadoras de 1,13 millones KWH/día de energía y un potencial de producción total de 236 MW.
Este potencial panorama ha fomentado la participación de actores como Nexans Colombia, líder en la electrificación sostenible. La compañía se ha destacado por desarrollar productos innovadores como la línea ‘solar tracker’ -paneles capaces de seguir el movimiento del sol para aumentar la producción de energía-, y los sets de soluciones para estaciones de carga eléctrica para vehículos ecológicos.
Al respecto, Nicolás de Guernon, gerente General de Nexans Colombia, afirma: ‘Hemos participado en más de 22 proyectos en Colombia, que suman más de 425 MW. Actualmente este país es de gran importancia para el grupo, considerando que el 62% de los proyectos de esta naturaleza en la región andina están en este territorio’.
Como se ha visto, la electrificación de fuentes renovables amerita de una gran inversión en áreas como el desarrollo e innovación de productos dentro de la industria energética. Lo anterior se convierte en una prioridad entendiendo que la transición a fuentes energéticas sostenibles es una bandera de muchos gobiernos y naciones alrededor del mundo.
En ese escenario, Nexans continuará innovando y respondiendo de manera eficiente y oportuna con soluciones seguras, accesibles y sostenibles.