Por Carlos Oviedo Risi, Country Manager para Argentina y Chile de IFX Networks.
La inteligencia artificial es una novedad que últimamente está en boca de todos. Se refiere a un campo de la informática que se enfoca en crear sistemas o programas capaces de realizar tareas que normalmente requerirían de la inteligencia humana. La IA busca imitar ciertas capacidades cognitivas de los seres humanos, como el razonamiento, la percepción o el procesamiento del lenguaje y el aprendizaje.
Existen diferentes enfoques dentro del campo de la inteligencia artificial, como el Machine Learning, donde los sistemas son capaces de aprender de forma autónoma a partir de los datos; el Procesamiento del lenguaje natural, que permite a la tecnología entender y comunicarse en lenguaje humano; y la visión artificial (computer vision), que permite a las máquinas interpretar y analizar imágenes y videos.
Este avance no deja de sorprender, revolucionando el paradigma social y tecnológico, y garantizando una nueva realidad que debemos entender, y sobre todo, saber manipular. Gartner estima que para el 2025 al menos un 50% de las empresas habrá diseñado plataformas de orquestación para operacionalizar la IA, en comparación con menos del 10% en 2020. En el campo de la ciberseguridad, la Inteligencia Artificial puede ser utilizada como una herramienta poderosa para mejorar la protección de la información, y por otro lado, también plantea desafíos y riesgos en términos de ataques y vulnerabilidades.
En primer lugar, la IA puede fortalecer la ciberseguridad de diversas formas:
- Detección de amenazas: Los sistemas de IA pueden analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real y detectar comportamientos anómalos que pueden indicar un ciberataque, como intentos de intrusión o malware. Con un correcto diagnóstico, pueden alertar de manera temprana a los profesionales de seguridad para tomar medidas inmediatas.
- Análisis de vulnerabilidades: La IA puede estudiar y evaluar la seguridad de los sistemas de las organizaciones en busca de posibles vulnerabilidades. Esto, puede prevenir las amenazas de ciberdelincuentes, tomando las medidas preventivas necesarias.
- Autenticación y acceso seguro: La inteligencia artificial puede usar técnicas de reconocimiento de voz, reconocimiento facial o análisis de comportamiento del usuario, para fortalecer la autenticación y el acceso seguro a las cuentas o plataformas.
A su vez, existe la llamada Inteligencia Artificial Ofensiva, que se refiere a la misma Inteligencia artificial y sus capacidades, pero utilizada para alterar los procesos IA de defensa. Esto, se puede dar sin demasiado esfuerzo, introduciendo datos falsos en el algoritmo que usa este sistema, alterando el machine learning de los dispositivos. Además, está estudiado que la IA Ofensiva puede crear correos falsos para el phishing al igual que los humanos, falsificar identidades y hasta generar imágenes falsas con alta verosimilitud, como hemos visto en tendencia últimamente con la imágen del Papa Francisco y una campera Moncler.
Mientras más evolucionan estas tecnologías, más beneficios y riesgos se desarrollan. Es por eso que no debemos tomar una postura negacionista, pero tampoco dejarnos estar sabiendo que hay diversas amenazas al respecto. Es necesario introducirse en el tema, confiar en los especialistas y apostar por soluciones de máxima seguridad.