Por Carla García, Directora para Nuevos Negocios para Zoho en América Latina
Las plataformas para la gestión de relaciones con los clientes (CRM, por su sigla en inglés) han comenzado a consolidarse como la mano derecha de millones de micro, pequeñas y medianas empresas en todo el mundo. Gracias al surgimiento de soluciones en la nube, con baja complejidad y un costo reducido, atrás quedaron los tiempos en que estaban destinadas solo a grandes corporaciones.
Existen muchas formas en que las pymes pueden sacar provecho de estos sistemas de CRM. Entre estas están, en primer lugar, organizar los datos de sus clientes ya que con un CRM, las pequeñas empresas pueden centralizar los datos de sus clientes en un solo lugar en la nube, para que sea posible encontrarlos y gestionarlos cuando sea necesario y desde cualquier dispositivo autorizado. Con esto, los negocios además se aseguran de que los registros tienen una misma estructura y están actualizados.
En segundo lugar, optimizar las estrategias de marketing y los procesos de ventas. El CRM permite crear y ejecutar campañas dirigidas a públicos objetivos que se conviertan en clientes potenciales. Mantener alineados los esfuerzos de marketing y ventas, ayudará a mantener el mejor retorno de la inversión gracias a las herramientas de automatización.
También se puede mejorar la interacción en tiempo real con los clientes, las empresas pueden conectar todos los canales para brindar la mejor experiencia de cliente: teléfono, correo electrónico y redes sociales. Es importante tener una interacción adecuada con los clientes para conseguir los objetivos.
Además, se logra incrementar las ventas y los ingresos. Las pymes pueden elevar sus ventas al contar con información precisa de los comportamientos, preferencias y gustos de los clientes. Con esto, pueden crear promociones para públicos objetivos o crear ofertas a la medida de cada usuario, con ventas cruzadas de productos o nuevas propuestas.
Finalmente, automatizar funciones repetitivas. Los CRM ayudan a realizar tareas que quitan mucho tiempo que los asesores podrían destinar a crear nuevas propuestas o buscar nuevos clientes. Así, por ejemplo, realizan envíos de correos con promociones específicas, a partir de las características de cada cliente, sin requerir de la interacción de alguna persona.
Los CRM son herramientas poderosas que permiten mejorar la satisfacción de los clientes, elevar la calidad de vida de los colaboradores y guiar el crecimiento empresarial en el largo plazo. Y ahora las pymes tienen la oportunidad de integrarlas a su operación rápidamente.