Por Eugenia Hereñú, directora de Personas y Operaciones, en VISMA Latam.
Diversidad e inclusión en los ambientes laborales hace tiempo que es tema de conversación. Sin embargo, ¿trabajamos en serio por la inclusión y la diversidad en el trabajo?…
Cuando se habla de diversidad e inclusión, lo primero que se tiene en cuenta son las cuestiones de género, pero esto es solo una pequeña parte de la cuestión, también hay que tener en cuenta a personas con discapacidades, personas con situaciones familiares o sociales complicadas que quieren salir adelante, gente de mediana edad a la que muchas veces no se la tiene en cuenta en las búsquedas laborales.
Las organizaciones de hoy deben buscar la forma de “abrazar” a las personas más allá de su género, sus habilidades físicas, sus complicaciones sociales/familiares o su edad. Y justamente esto último es un tema que, generalmente, no se lleva a las conversaciones, “de eso no se habla”.
Es muy difícil conseguir trabajo para personas mayores de 50 años en el mercado, y esto se acentúa cuando los postulantes no tienen título universitario. Se trata de una situación que sucede a diario y no contribuye al desarrollo económico de la sociedad.
El segmento de personas +50 en su plenitud laboral, pero que no consiguen trabajo, es un escenario común en todo el mundo y preocupa a los dirigentes de las naciones.
En Davos 2020, Mercer presentó un informe en el que se estimaba que entre 2015 y 2030 habría más de 200 millones de personas mayores de 65 años que seguirán activos laboralmente a nivel mundial.
También en 2020, Adecco manifestó que en Argentina solo 2 de cada 10 ofertas laborales están dirigidas a personas con más de 45 años (representaba alrededor de 800.000 personas). En el mercado local se estima que el 80% de las ofertas de empleo son para menores de 45.
Según los resultados de un estudio reciente de la Organización Mundial de la Salud (OMS – “Envejecimiento y Salud”, 2022):
- Entre 2015 y 2050, el porcentaje de los habitantes del planeta mayores de 60 años casi se duplicará, pasando del 12% al 22%.
- En 2020, el número de personas de 60 años o más superó al de niños menores de cinco años.
- En 2050, el 80% de las personas mayores vivirá en países de ingresos bajos y medianos.
- El ritmo de envejecimiento de la población es mucho más rápido que en el pasado.
- Todos los países se enfrentan a retos importantes para garantizar que sus sistemas de salud y de asistencia social estén preparados para afrontar ese cambio demográfico.
- En 2030, una de cada seis personas en el mundo tendrá 60 años o más. Hoy ese grupo son 1000 millones de personas, que en 2030 ascenderá a 1400 millones. En 2050, la población mundial de personas de 60 años o más se habrá duplicado (2100 millones). Se prevé que el número de personas de 80 años o más se triplique entre 2020 y 2050, hasta alcanzar los 426 millones.
El mercado laboral para personas +50 es una preocupación mundial, ya que viene de la mano de deficientes sistemas jubilatorios.
El desafío de RH: Reeducar a los líderes actuales para abrazar a los +50
Si bien se ganó terreno en algunos países sobre la contratación de talentos +50, sabemos que desde RH tenemos la misión de “reeducar” a las generaciones de líderes actuales, que no nacieron con este tema como algo natural, ya incorporado para tener en cuenta en la formación de sus equipos. A esta situación se suma lapreferencia del “trabajo remoto” y una mayor flexibilidad laboral, especialmente por parte de las generaciones más jóvenes (centennials), lo cual se acentúa cada vez más luego de la pandemia de 2020 y a lo que se suman otras generaciones.
Las personas +50 están en lo mejor de su vida y pueden constituir el diferencial muy valioso en una organización, ya que cuentan con habilidades que suman al conjunto:
- Máximas capacidades intelectuales desarrolladas (en lo académico y por su trayectoria).
- Experiencia en manejo de situaciones laborales (a nivel de negocio y de manejo de grupos, tanto internamente como con clientes y proveedores).
- Mayor percepción de escenarios(un “olfato” especial que lo da su trayectoria) que raramente tiene un candidato más joven.
- Sentido de la responsabilidad laboral más desarrollado (en parte porque pertenece a una generación en la que el trabajo era una de las prioridades de la vida).
Las personas +50 tienen mucho para dar en las empresas, tanto a nivel de resultados del negocio como de empatía y relaciones cordiales en los equipos e interáreas. Pueden ser mentores de los nuevos talentos, acompañarlos en los primeros pasos de su carrera profesional.
Quienes lideran las compañías en el tercer milenio deben trabajar para lograr un cambio de mindseten su estilo de management según las necesidades actuales, un nuevo escenario que les cambia la estrategia para la conquista y la conservación de talentos.
Entre los muchos cambios en la nueva dinámica laboral, los colaboradores +50 pueden ser una ventaja competitiva en los equipos, con una visión holística que beneficia al conjunto para poder lograr los objetivos de forma eficiente y contagiar de una nueva energía a los más jóvenes.