
Cómo adaptar las infraestructuras para la evolución tecnológica
La inteligencia artificial (IA) está transformando la vida de los usuarios y las empresas; pero su constante evolución pone en peligro a los datos y además trae consigo amenazas desconocidas que los equipos no están preparados para enfrentar.
Un reciente informe de la empresa de tecnología F5 revela que el 96% de las organizaciones ya utilizan modelos de IA y estima que en tres años va a impulsar el 80% de las aplicaciones. Sin embargo, la mayoría de las empresas aún luchan con infraestructuras viejas que no pueden manejar el volumen de tráfico dado por esta nueva herramienta.
Para abordar estas dificultades, es fundamental pensar soluciones que puedan contrarrestar la complejidad de las infraestructuras, proteger los datos y también garantizar el rendimiento de las aplicaciones impulsadas por IA. Especialistas en tecnología y ciberseguridad responden de qué manera adecuar los equipos a la innovación tecnológica y anuncian novedades.
‘La IA está acelerando la innovación. Pero también incrementa los costos, la complejidad y los crecientes riesgosde seguridad que mantienen a los equipos de TI y seguridad en permanentes crisis’, dice el presidente y CEO de F5, François Locoh-Donou.
Estar al borde de los avances tecnológicos
¿Qué tienen en común los autos que funcionan por su propia cuenta, la detección de fraudes en tiempo real, los avances en robótica y la realidad virtual? Cada uno de estos avances utiliza lo que se llama Inteligencia Artificial en el borde.
En estos casos, la IA funciona con sistemas remotos que recopilan datos y responden rápidamente a cambios o anomalías para comprender el entorno en el que operan. Sus beneficios son la reducción de la latencia (es decir, el procesamiento de datos), una mejor experiencia del usuario y optimización del uso de los recursos.
‘Las empresas y proveedores de servicios ven el borde como un área de creciente interés porque la ingesta de datos y la inferencia ya no tienen que tener lugar en una ubicación centralizada o en torno a la nube’, explica Ahmed Guetari, vicepresidente de productos para proveedores de servicios en F5 sobre el rol que fue tomando este tipo de IA.
En marzo de este año, la compañía anunció una colaboración con la empresa tecnológica NVIDIA para hacer realidad nuevas funciones de redes nativas de nubes. Se estima que funcionará para casos donde es necesaria la IA al borde.
ADC 3.0, un dispositivo de confianza
Otra opción para mantener actualizados los equipos frente a la evolución de la IA son los ADC 3.0. Se trata de un dispositivo que normalmente se coloca en el centro de datos entre el cortafuegos y uno o más servidores de aplicaciones (un área conocida como DMZ). Estos controladores hacen posible la convergencia entre cargas de alto rendimiento y la gestión del tráfico.
‘La convergencia de las capacidades de seguridad y entrega de aplicaciones será indispensable para las empresas que se esfuerzan por mantenerse a la vanguardia en este panorama de rápida evolución’, afirma Christopher Rodríguez, director de investigación de ciberseguridad y confianza de la compañía IDC.
Entre sus beneficios se puede destacar que es fácil implementarlo en cualquier lugar para que funcione sin problemas en diversos entornos de TI actuales. También es automático y puede ser personalizado según las necesidades de la empresa.
Otras soluciones
En cuanto a otras novedades de F5, la organización anuncia la incorporación de herramientas y asistentes de IA que pueden ayudar a las empresas y proveedores de servicios en diversas tareas. Estas innovaciones sirven para hacer más fácil la configuración y optimización de las aplicaciones, proteger a los equipos frente ataques, automatizar tareas y procesar grandes cantidades de datos de forma rápida y segura.
Entre estas nuevas herramientas, destacan las nuevas incorporaciones de la línea de productos VELOS, fundamental para cargas de trabajo con 5G. Se trata de un aliado frente a la batalla contra bots y otras amenazas sofisticadas.