Los intentos de transacciones fraudulentas aumentaron un 92% en 2022
NICE Actimize ha publicado el ‘Informe NICE Actimize Fraud Insights 2023’, que analiza el panorama bancario y de pagos y revela las amenazas más apremiantes y los estándares que afectan las instituciones financieras. Aprovechando el X-Sight de NICE Actimize, que utiliza inteligencia colectiva y aprendizaje asociado para detectar amenazas y patrones de actividad sospechosa, el informe se creó analizando miles de millones de transacciones y pagos bancarios, que representan valores que superan los US$ 110 mil millones de dólares.
La investigación de NICE Actimize muestra que el aumento del fraude bancario es una preocupación creciente tanto para las instituciones financieras como para los consumidores. Los delincuentes se están volviendo cada vez más sofisticados, cambiando sus tácticas de piratería de cuentas tradicionales y el fraude de autorización a un fraude de pagos autorizados más complejo (estafas). Esto no solo complica el panorama de amenazas, sino que también pone a las instituciones financieras en riesgo de doble pérdida, tanto para sus propias víctimas como para terceros.
El informe también indica que de 2021 a 2022, los intentos de transacciones fraudulentas aumentaron en un 92%, y los valores de los intentos de fraude se dispararon en un 146%. Esta tendencia alarmante destaca dos puntos principales: en primer lugar, ha habido un aumento espectacular en los volúmenes generales de transacciones y, en segundo lugar, los estafadores son cada vez más intrépidos y apuntan a fraudes más grandes. El informe también indica que el fraude no se limita a un solo canal, es una amenaza compleja y multicanal marcada por la transformación digital, el comportamiento cambiante del consumidor y los patrones de fraude. El informe también estima que la cantidad absoluta de intentos de fraude de pago autorizados ha superado las cantidades de fraude de apropiación de cuentas, un 45,9% más año tras año, considerando el período entre 2021 y 2022.
‘Los estafadores están aprovechando la innovación en métodos de pago más rápidos para realizar estafas sofisticadas que involucran ‘mulas’, que transfieren fondos fuera de las instituciones financieras, fondos que a menudo son irrecuperables’, dice Craig Costigan, Director Ejecutivo de NICE Actimize, ‘A medida que evoluciona el panorama digital, también lo hacen las tácticas de fraude. Las amenazas identificadas en nuestro informe son un recordatorio alarmante del riesgo siempre presente en los pagos digitales. Las instituciones financieras deben fortalecer su seguridad y revisar el control de sus canales digitales para adelantarse a las amenazas nuevas y emergentes’.
A medida que el mundo avanza hacia una sociedad sin efectivo, el volumen de transacciones aumenta y también la cantidad de fraude en todos los canales y tipos, incluidas las transacciones en línea, móviles y en persona. La investigación de NICE Actimize expone este problema alarmante y destaca la necesidad de incorporar tecnologías de vanguardia como el aprendizaje automático (ML) y la inteligencia artificial (IA) para identificar incluso las estafas más sofisticadas.
El informe también indica que el fraude relacionado con ‘mulas’ es uno de los principales desafíos que enfrentan las instituciones financieras, ya que es un elemento crucial en las estafas y fraudes de pagos autorizados, el fraude de cuentas nuevas y el movimiento de fondos obtenidos ilícitamente. El informe explica que, si bien las ‘mulas’ no generan una pérdida directa para las entidades financieras, sí impactan en los ingresos, ya que estas cuentas no son rentables. Por el contrario, son costosos de adquirir y mantener, además de exponer a las instituciones desde el punto de vista regulatorio, lo que puede dañar la reputación de las empresas.
Los datos del informe mostraron que:
- El 59% de los fraudes de cuentas nuevas están relacionados con “mulas”, y la mayoría muestra características de este fraude dentro de los 30 días, lo que indica el problema casi al instante.
- El dinero generalmente se mueve en una red de mulas dentro de las dos horas antes de desaparecer por completo, dejando la cuenta en un rango de 12 horas.
Utilizando datos anónimos, la información para este informe se recopiló a través de canales de pago en línea y fuera de línea, incluidos P2P, ACH, transferencias, cheques y transacciones con tarjeta.