¿Por qué los nuevos refrigerantes son clave para ayudar a los DC a cumplir los objetivos ambientales?
Por Enrico Miconi, Global Product Manager de Vertiv.
El verano es tradicionalmente una época para disfrutar las vacaciones (o este año, quizás, disfrutarlas en casa), tomar el sol y reunirse con la familia y amigos. Sin embargo, en años recientes, en algunas partes del mundo, el aumento de los fenómenos meteorológicos extremos ha creado una nueva cara no deseada al verano.
Este verano, varias partes del mundo, como Estados Unidos de América, Canadá y zonas del RU, han experimentado calor extremo, mientras que, en Alemania, en julio, se registró la peor inundación en décadas.
Según los expertos, el clima extremo aumentará con el cambio climático. Para mitigar el cambio climático, todo el mundo, incluidos los centros de datos, deben poner de su parte para reducir las emisiones de carbono.
Para los centros de datos, esto significará hacer más con menos. Estos deben proporcionar más potencia informática para responder a la creciente demanda de consumidores y negocios, al consumir menos energía y reducir a la vez su huella de carbono.
Sentir el calor: Normas ambientales y centros de datos
¿Cómo pueden los centros de datos, que presentan un mayor crecimiento y expansión, cumplir con las nuevas normas ambientales sin sacrificar el rendimiento? ¿Cómo pueden escalar con confianza para dar soporte a la nueva de ola de nuevas tecnologías de computación intensiva como la inteligencia artificial (IA), la realidad virtual y la 5G? El traslado a las redes móviles de quinta generación probablemente incrementará el consumo energético total de la red en un 150-170 por ciento para 2026.
Mucho dependerá del uso de tecnologías de enfriamiento más eficientes. En todo el mundo, los gobiernos han comenzado a prohibir o restringir el uso de refrigerantes que producen una gran cantidad de emisiones de carbono (o alto potencial de calentamiento global, conocido como “GWP” en la jerga industrial), como los hidrocarburos fluorados (HFC).
En Europa, por ejemplo, una normativa de la Unión Europea (517/2014) pretende eliminar gradualmente el uso de ciertos gases de efecto invernadero empleados en los refrigerantes. China y Estados Unidos han introducido normativas similares.
El progreso hacia una infraestructura digital más sostenible será más fácil si la industria puede convenir estándares de eficiencia energética. El código de la Unión Europea para la eficiencia energética en los centros de datos podría contribuir a apoyar los avances en la sostenibilidad de las tecnologías de enfriamiento.
Las iniciativas voluntarias de la industria —tal como el “Pacto por la Neutralidad Climática de los Centros de Datos” en Europa entre los proveedores de infraestructura en la nube y los operadores de centros de datos, quienes acordaron hacer los centros de datos europeos climáticamente neutros para 2030— son otro avance alentador.
Un futuro verde
Algunos centros de datos, como el Green Mountain de Noruega, también están marcando la pauta. Esta antigua instalación de almacenamiento de municiones de alta seguridad de la OTAN, situada en las profundidades de las montañas noruegas y convertida en un centro de datos, funciona totalmente con energía hidroeléctrica.
Esta ubicación única ofrece una gran ventaja que aprovecha las fuentes de energía renovables y minimiza el equipo de enfriamiento para lograr operaciones con un nivel de CO2 cercano a cero. Sin embargo, como todos los centros de datos, este requiere de sistemas de gerenciamiento térmico para mantener un tiempo de funcionamiento óptimo.
Recientemente, Green Mountain, uno de los centros de datos más sostenibles del mundo, se ha convertido incluso en uno de los más ecológicos al actualizar sus tecnologías de gestión de potencia y gerenciamiento térmico en asociación con Vertiv.
Tras una exhaustiva búsqueda, los ejecutivos de Green Mountain visitaron los Centros de Experiencia del Cliente de Vertiv en Italia para ver estas tecnologías en acción y probar su rendimiento en condiciones óptimas.
Como resultado, Green Mountain eligió la alta eficiencia de las unidades perimetrales de agua helada Vertiv Liebert PCW para una capacidad total de enfriamiento instalada de 5 MW. El Liebert PCW ofrece altos estándares de eficiencia gracias a la combinación de las últimas tecnologías y un diseño interno que optimiza la aerodinámica de los componentes internos.
De acuerdo con la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) [1], [2], [3], los centros de datos desempeñan un papel esencial al encontrarse en el epicentro de la innovación tecnológica, la eficiencia energética, las energías renovables y la economía de los datos habilitada por la digitalización.
Los operadores de centros de datos como Green Mountain pueden servir de modelo para acelerar la transición energética sostenible y abrir el camino que podrían seguir otras industrias que son altas consumidoras de energía.
La última innovación en enfriamiento de Vertiv
Como parte de los esfuerzos de Vertiv por la sostenibilidad de los centros de datos, hemos lanzado recientemente la última versión de Vertiv Liebert AFC, una innovadora gama de enfriadores con tecnología inverter de tornillo y refrigerante amigable con el ambiente.
El producto consume menos energía, con un nuevo refrigerante HFO que normalmente produce mil veces menos emisiones de carbono que los refrigerantes tradicionales. El enfriador se instala fuera de los centros de datos, generalmente en los tejados de las instalaciones o en el perímetro del edificio.
Está disponible en varias versiones, lo que significa que puede adaptarse a diferentes climas (tecnologías de enfriador, free-cooling y free-cooling sin glicol), y puede funcionar en un amplio rango de temperaturas —desde -25 grados Celsius hasta +56 grados Celsius.
Otras ventajas incluyen la posibilidad de utilizar agua pura dentro del centro de datos, lo cual reduce el riesgo de contaminación ambiental y asegura menores costos de instalación y serpentines de free-cooling optimizados (serpentines un 25 % más grandes para maximizar el intercambio de calor al usar aire ambiente externo como principal fuente de enfriamiento), y asegura una mayor capacidad y más horas de free-cooling para alcanzar una mejor eficiencia estacional y menores costos operativos.