Con una agenda centrada en la transformación energética, la eficiencia en los centros de datos y el impacto de la inteligencia artificial, Schneider Electric abrió las puertas de su planta Funza a medios de comunicación, líderes del sector tecnológico y expertos en sostenibilidad. La jornada fue una oportunidad para conocer no solo las capacidades de producción e innovación de la compañía, sino también su visión sobre el rol que juega la tecnología en la construcción de un futuro más eficiente, digital y sustentable.
El evento fue liderado por el equipo directivo de Schneider Electric de Colombia y Ecuador. La apertura estuvo a cargo de Javier Ortiz, Presidente de Ecuador, Venezuela y Colombia de Schneider Electric, quien dio la bienvenida destacando el orgullo que representa la planta para la compañía y su relevancia para la producción energética sostenible en la región.
´Nuestra planta es un motivo de orgullo. No solo genera empleos y productos de alta competitividad en Colombia, sino que ha sido reconocida como un referente global al ser la primera planta Schneider en el mundo en alcanzar carbono cero desde 2024´, destacó Ortiz.
Durante su intervención, hizo énfasis en la conexión entre inteligencia artificial y eficiencia energética, desmitificando creencias comunes y proponiendo una visión informada y estratégica sobre cómo estas tecnologías están cambiando la dinámica de consumo y producción energética a nivel global.
Inteligencia artificial: ¿amenaza o aliada?
Ortiz contextualizó los retos actuales derivados de la acelerada adopción de inteligencia artificial (IA), una tecnología que, si bien impulsa el crecimiento económico y la productividad, también demanda una alta capacidad energética.
Algunas cifras que compartió ponen el tema en perspectiva:
– El 82% de los líderes empresariales se identifican como pioneros en IA, pero solo el 17% han implementado iniciativas concretas.
– El 30% de las empresas que ya han integrado IA reportan un impacto significativo en sus resultados financieros.
– Cada búsqueda con IA puede consumir hasta 10 veces más energía que una búsqueda tradicional.
Estas cifras exponen el dilema: ¿cómo balancear el impacto positivo de la IA con el incremento en la demanda energética que representa? La respuesta, para Schneider Electric, está en un enfoque basado en eficiencia y responsabilidad.
Uno de los principales mensajes del evento fue la necesidad urgente de reducir el desperdicio energético. A nivel global, se pierde aproximadamente el 66% de la energía que se produce. En Colombia, uno de cada cinco ciudadanos aún sufre pobreza energética, lo que demuestra la necesidad de optimizar tanto la oferta como la demanda.
En base a esto, Ortiz propuso un enfoque basado en tres ejes para enfrentar esta crisis:
– Descarbonización, que podría contribuir a resolver el 49% del problema climático.
– Electrificación, que aportaría un 19% al objetivo.
– Eficiencia energética, que representa una oportunidad inmediata y puede atacar el 32% del problema con tecnologías disponibles hoy.
´La eficiencia energética es el héroe sin capa. Es un problema que se puede empezar a resolver ya´, opinó Ortiz.
IA al servicio de la eficiencia energética
Durante la presentación también se exploraron casos concretos de cómo la IA puede ser parte de la solución, optimizando el uso de energía en industrias, hogares y ciudades. Desde la automatización de procesos hasta la implementación de micro redes inteligentes, Schneider Electric está apostando por una infraestructura energética más distribuida, eficiente y conectada.
Además, se destacaron tres acciones clave que la industria puede tomar para reducir el impacto energético de la IA:
– Desarrollar hardware más eficiente, en alianza con empresas como NVIDIA.
– Optimizar modelos de IA para hacerlos menos exigentes en consumo.
– Descentralizar el cómputo, llevando la IA a dispositivos móviles y reduciendo la dependencia del procesamiento en la nube.
En el tema de microgrids, también se abordó cómo en los centros de datos ocurre una tendencia similar con el edge computing, que permite que el dato esté más cerca del usuario y se reduzca la latencia. La adopción de IA, en este sentido, implica también una transformación en la forma en que se diseñan y operan los protocolos tecnológicos. Adaptarse bien a estos cambios, simplificar tareas y aprovechar su potencial será clave para su integración eficiente. Finalmente, se remarcó que la eficiencia energética no solo es vital para enfrentar la crisis climática, sino también para el desarrollo económico del país en el futuro.
La visita incluyó un tour técnico por el showroom de la planta Funza, guiado por Andrés Reyes, experto en soluciones energéticas, seguido de un recorrido por el centro de datos ubicado dentro de la planta, y finalmente una visita guiada por Luis Cruz, director de la planta, quien explicó los procesos de producción que han convertido a Fulsa en un referente mundial en sostenibilidad.
Esta planta, que ya opera con carbono neutralidad, representa el compromiso tangible de Schneider Electric con su ambicioso objetivo global: alcanzar la neutralidad total en todas sus operaciones para 2025.
Voceros estratégicos y perspectivas complementarias
Además de Javier Ortiz, la jornada contó con las intervenciones de:
– Marta Sánchez, VP de Secure Power y Data Center para Sudamérica, quien expuso cómo la inteligencia artificial está transformando los centros de datos desde su diseño hasta su operación. En su intervención, destacó que, si bien la IA genera un mayor consumo de energía, también es la herramienta que permite una mayor eficiencia operativa.
Sánchez explicó que estamos entrando en una nueva era de centros de datos, donde la infraestructura debe ser capaz de soportar cargas de alta densidad y comportamientos energéticos volátiles. El uso de IA permite no solo automatizar procesos y predecir comportamientos, sino también optimizar el diseño, el acceso y la disponibilidad energética. En este contexto, resaltó que Colombia tiene ventajas competitivas importantes como el acceso a energías renovables y disponibilidad energética, a diferencia de otras regiones como Europa o Estados Unidos donde la vacancia energética es mínima.
También compartió que el crecimiento de la demanda de centros de datos en Colombia está proyectado a pasar de 65 MW actuales a más de 200 MW en cinco años. Este incremento energético, sostuvo, está respaldado por una matriz energética sólida y renovable.
A nivel de diseño, enfatizó que los centros de datos deben evolucionar con rapidez, contar con arquitecturas diversas según el tipo de uso (entrenamiento, inferencia, baja latencia), y estar preparados para manejar nuevas tecnologías como refrigeración líquida de alta eficiencia y chips de hasta 132 kW por rack, como los desarrollados en alianza con NVIDIA.
Esta colaboración con NVIDIA también incluye la creación de gemelos digitales para simular y garantizar un manejo energético eficiente desde el grid hasta el chip. Desde transformadores hasta UPS y sistemas de refrigeración, Schneider busca integrar todas las soluciones que permitan optimizar el flujo energético y garantizar operaciones seguras, sostenibles y resilientes.
En su reflexión final, Ortiz abordó los desafíos locales: la desigualdad digital, la falta de regulación en nuevas tecnologías y la brecha de talento técnico en Colombia. Frente a estas barreras, Schneider impulsa programas de formación y acceso a tecnologías para fortalecer la infraestructura digital del país.´La inteligencia artificial no es el problema, es parte de la solución. Pero su adopción debe ser estratégica, eficiente y responsable´, finalizó Ortiz.
