Factura Electrónica en Perú: potenciando la Gestión y el Desarrollo
Más allá de las campañas para incentivar el uso de la factura electrónica en el Perú por parte del ente regulador, la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria, SUNAT, aún falta conocimiento de lo que esta modalidad implica y, por sobre todo cuáles son sus principales beneficios para el empresariado peruano, ya sea grande, mediano o pequeño.
En concreto, la SUNAT cuenta con la factura electrónica MYPE, sistema dirigido a las microempresas que manejan volúmenes muy bajos de facturación; y la factura electrónica generada desde los sistemas del contribuyente, orientado a medianas y grandes empresas, así como también a pequeñas con grandes volúmenes de facturación. Para cualquier caso, la empresa que quiera ser reconocida como emisor electrónico por la SUNAT debe pasar por un proceso de homologación, junto a su proveedor de facturación electrónica, con el fin de testear técnicamente la expertise de los sistemas.
Una vez realizado lo anterior, será posible facturar de manera electrónica y aprovechar sus múltiples ventajas como herramienta de apoyo a la gestión. Entre ellas, el ahorro, tanto en costos operacionales como en tiempo, papel, recursos humanos y horas hombre; además, es un medio mucho más seguro, transparente, fácil de utilizar y rápido. También puede ser una carta importante a la hora de comercializar con clientes y proveedores.
Al facturar electrónicamente, la información va directamente a SUNAT y al cliente, en una triangulación completa y segura, donde el ente regulador sólo puede ver el documento electrónico; no la contabilidad completa de la empresa. Además, cada factura tiene su nota de crédito.
Sin duda, es una modalidad más económica y fácil de utilizar que puede aportar importantes avances en términos de desarrollo y crecimiento, pues optimiza no sólo la gestión empresarial, sino también la mejor toma de decisiones. En definitiva, permite que el control esté a un click.