Rediseñar un Datacenter antiguo
Muchos pueden ser los motivos o necesidades para plantearse la posibilidad de rediseñar un Data Center en operación y considerando el ritmo al que se mueve la industria y la tecnología, en poco tiempo un Data Center puede considerarse antiguo. A los efectos de establecer una línea de base, asumiremos como Data Center antiguo aquel que ha cumplido los años de operación estimados para el ciclo de vida al momento del Diseño y también asumiremos que para llegar a la decisión de rediseñar hemos comparado con alternativas como construir algo nuevo, contratar alojamiento, colocación o servicios de procesamiento/almacenamiento en la nube y la conclusión este análisis nos introduce al proceso de rediseño como la mejor opción.
Varios son los motivos que pueden activar el proceso de rediseño de un DC y las necesidades más frecuentes son las vinculadas a los Sistemas de Capacidad, concretamente, demanda de Potencia y Enfriamiento, bien porque no se consideró la posibilidad de escalamiento en el diseño original o bien porque la sala ya ha escalado a su Capacidad Total. Otro escenario puede ser la necesidad de aumentar el grado o porcentaje de disponibilidad para la Operación con mayores niveles de redundancia o mayor categorización (Tier, Clase, etc.). Los procesos de mejora en la eficiencia también pueden disparar un rediseño en la medida de que la ecuación costo beneficio lo justifique, es decir, un replanteo mediante el análisis del Costo Total de Propiedad.
Rediseñar frente a las necesidades espacio físico, salvo que sea para corrigiendo o mejorando defectos de la planta original y su distribución, no son una alternativa que generen grandes expectativas de maximización del espacio, además en caso de disponer de lugar físico ocioso o utilizable, el proyecto se consideraría como una Fase de Ampliación más que un rediseño. Los sistemas de telecomunicaciones y topologías de red generalmente son fácilmente rediseñables o adaptables sin afectar los sistemas de capacidad, por lo que tampoco nos concentraremos en ellos. La migración a configuraciones hiperconvergentes de equipamiento o Data Centers generalmente no implican grandes aumentos de potencia, al contrario, el consumo puede disminuir en términos reales, variando la distribución y creando nuevos puntos calientes que se resuelven rediseñando.
En primera instancia es necesario considerar en el proyecto si el equipamiento existente en operación será expuesto a nuevos riesgos para los que no existen previsiones y si se deben asegurar contingencias tanto en el Presupuesto como en el Plan de Comisionamiento. La realización de un Assessment previo se justifica como una herramienta de valor a la hora de verificar la vigencia de los documentos existentes al igual que la realización de un Tier Gap Analysis para el cambio de categoría del Data Center.
Las técnicas de mejora de la eficiencia permiten aprovechar al máximo o incluso aumentar la capacidad de los racks mediante cambios, que requieren de reingeniería pero de forma “no intrusiva”, es decir, sin la necesidad de cambiar o agregar nuevos elementos a los sistemas ni modificar su capacidad. Como primera medida podemos intentar aumentar la temperatura de la sala al máximo de los límites confiables. Mediante técnicas de Manejo de Cambios apoyadas en información del DCIM y eventualmente con modelos CFD, es posible redistribuir el equipamiento TI en zonas de calor homogéneas y manejar la Capacidad de forma más eficiente. La instalación de sistemas de contención y cerramiento de ambos pasillos separando flujos de aire frío y caliente, mejorada con la instalación de canalizaciones para de la distribución de aire frío y plenos de retorno, sin importar el modelo de enfriamiento, nos permitirá aprovechar al máximo la capacidad y modulación del enfriamiento.
Si el requerimiento de potencia sobrepasa la Capacidad Total instalada, no hay dudas de que es necesario instalar nuevo equipamiento y las modificaciones impactan a toda la cadena, Generadores, Transformadores, UPSs, Tableros, Distribución, Enfriadoras y Manejadoras y la eficiencia de todos los Sistemas. Dependiendo de la topología existente, se podrán agregar nuevos equipos de forma modular o se deberán realizar instalaciones agregadas de forma independiente, priorizando en la evaluación el menor impacto en la Operación con un menor costo y tiempo de instalación.
Por ejemplo, la nueva distribución de potencia puede ser realizada mediante sistemas de barras blindadas que permiten conexiones mono o trifásicas, de fácil y rápida instalación incluso en paralelo a la instalación cableada existente. Las unidades de distribución de energía en los racks (rPDU) se pueden reemplazar por otras de mayor capacidad o instalar adicionales complementarias dependiendo de las conexiones de los equipos. La complejidad mayor del proceso de ampliación de potencia está en la necesidad de modificar o reemplazar componentes y protecciones del sistema de distribución en tableros, transferencias, por lo que las maniobras deben ser coordinadas en función de los riesgos y las necesidades de parada, al igual que en los sistemas de enfriamiento.
Las ventajas de poder reconstruir una sala sin equipos en funcionamiento contra una en operación son inversamente proporcionales a los costos y riesgos, por lo que la consideración de una colocación temporal de equipos, puede ser interesante de analizar, sobre todo para los Data Center Empresariales.
La tendencia de evolución de la potencia por rack se ha incrementado desde los primeros diseños de 3kW por rack a los actuales 20 o 30kW en racks de alta densidad. La migración a éstos equipos también puede ser realizada con el concepto de sala dentro de la sala (room inside a room) es decir, con la adopción de tecnología aplicable concretamente a los racks que permita modificar un espacio físico por ejemplo una o preferentemente dos filas completas que serán reemplazados por sistemas de racks autocontenidos. Los fabricantes de estos sistemas han previsto opciones de productos que permiten diseñar conjuntos “aislados” con sistemas de enfriamiento de gran capacidad integrados al propio rack o enfriamiento en la fila, que además cuentan con opciones de distribución de energía simples lo cual permite realizar instalaciones nuevas de los sistemas de capacidad independientes y no afectar el resto de la infraestructura instalada ya que operarían en paralelo, incluso permitiendo aprovechar el concepto de salas Multi Tier, para mejorar o ajustar el nivel de disponibilidad de los nuevos requerimientos a las necesidades actuales del negocio. Este concepto se asemeja mucho al de Data Center modular, tal como si instaláramos un “contenedor” dentro de una sala existente y planificáramos la escalabilidad eficiente por la vía de la modularidad.
Rediseñar un antiguo Data Center plantea mayores consideraciones que un diseño de cero y requiere seguramente más tiempo de ejecución pero no representa de ninguna manera un desafío imposible de concretar, ajustando viejos diseños a modernos conceptos, alineados con los nuevos modelos de negocio o requerimientos de la industria TI.
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