Consejos para una videoconferencia exitosa
La videoconferencia se ha convertido rápidamente en un estándar de negocios en innumerables industrias. Realizar reuniones cara a cara es un elemento vital en la comunicación laboral, aunque los participantes se encuentran en puntos opuestos del globo. Existen cinco elementos básicos para el desarrollo de una videoconferencia exitosa:
Facilidad de uso
La mayoría de los usuarios está de acuerdo en que una interfaz conocida y amigable le gana siempre a una menos intuitiva. Sin dudas, preferimos una experiencia de usuario familiar del tipo ‘pulse este botón para entrar en mi llamada’.
Disponibilidad de otros para llamar
Las soluciones de bajo costo y alta disponibilidad, con muchos usuarios, son vitales para el éxito de cualquier instalación de video. En el pasado, por ejemplo, el costo de la tecnología era prohibitivo para un uso masivo. Pero, ese ya no es el caso. Hoy, la capacidad de llamar a otros tiene que ser sencilla: si es demasiado complicado hacer una llamada, la gente simplemente no la hace.
Calidad de audio
Otro punto de suma importancia, es la calidad de los altavoces y micrófonos. Últimamente, estos dispositivos son tan sofisticados que pueden captar cualquier sonido en la sala, incluso aquello que no queremos oír como, por ejemplo, el teclado, el ventilador de la notebook, etc. Es por eso que, las soluciones de audio no solo deben amplificar las voces, sino también eliminar todo ‘ruido’ posible.
Calidad de video
Existen varios criterios que definirán la calidad de nuestro video, a saber: resolución, precisión del color, cuadros por segundo y latencia, variación de retardo y artefactos. Y cada uno de ellos afecta de diferentes maneras:
– Resolución: Definida como el número de píxeles en la pantalla. Cuanto mayor sea, más nítida será la imagen en cuestión. Estos valores pueden oscilar entre 720p o 1080p o, mejor aún, llegar a los 4K.
– Precisión del color: Es bastante buena en las soluciones de video modernas en las que la iluminación es óptima.
– Imágenes por segundo y latencia: Por lo general, trabajan en tándem, es decir, cuantas más imágenes, más naturales y más claros se verán los participantes de nuestra videoconferencia. Esto reduce la latencia y, fundamentalmente, evita la diafonía.
– Variación de retardo y artefactos: Tiene que ver con el ancho de banda requerido. Cuando es mayor al disponible, la imagen se pixela generando un desajuste entre el movimiento de las bocas y las voces.
Capacidades de colaboración de datos
Para muchos usuarios, la posibilidad de colaborar con documentos en tiempo real se impone por sobre el aspecto del video. No obstante, es más importante la conexión emocional de una videollamada que el aspecto de los datos de una sesión.
Conclusión
El mercado de las videoconferencias está en un punto de inflexión. La nueva tecnología aborda a las videoconferencias con la misma facilidad de uso con la que se conecta una cámara web, asegurando alta calidad de audio y video.
Si bien el número de dispositivos específicos para videoconferencia ha disminuido en los últimos años, dada la necesidad de resolver los problemas de los usuarios, prevemos un importante crecimiento del sector en 2017.